Receta facil bizcocho de yogur de limon

Tarta de yogur y limón
Aquí tienes algo para alegrarte la semana: una receta fácil y sabrosa de tarta de yogur y limón. Este tipo de tarta de yogur tiene sus raíces en Francia, y lo mejor de ella es su sencillez. La lista de ingredientes es breve y sencilla, y no se necesita ningún equipo especial para prepararlo: un par de cuencos, un molde para pan y una batidora. También necesitará tazas medidoras para preparar esta receta, pero -¡dato curioso! - En Francia, los pasteleros caseros pueden medir los ingredientes del bizcocho en un recipiente de yogur, lo que lo hace aún más sencillo.Como me encanta todo lo que tenga limón (¿a alguien le sorprende?), espolvoreo mi bizcocho de yogur con ralladura de limón y lo cubro con un glaseado rápido de limón. El resultado es un bizcocho húmedo, rico y tierno, con el sutil sabor del yogur y el toque cítrico del limón. Si eres como yo, pedirás un segundo trozo en cuanto termines el primero.
A continuación, hornear. Vierta la masa en un molde engrasado y llévelo al horno a 350°C. Hornee hasta que el pastel esté hinchado y dorado y al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio. Deje que el pastel se enfríe completamente en el molde.
¿Para qué sirve añadir yogur a un pastel?
Su cremosidad ayuda a mantener la humedad de los productos horneados. Su acidez ayuda a activar el bicarbonato de sodio, que puede hacer que los productos horneados sean esponjosos y ligeros. Su acidez ayuda a activar el bicarbonato de sodio, que puede hacer que los productos horneados queden esponjosos y ligeros. Puede sustituir a la nata agria, la mayonesa o la crème fraîche, aportando el mismo sabor ácido con menos culpa.
¿A qué sustituye el yogur en un pastel?
El yogur griego puede sustituir a la leche, la nata agria y la nata espesa. Leche: Si te falta leche, nata líquida o nata líquida, puedes utilizar yogur griego para compensar la diferencia. Si la receta requiere una taza de leche, utiliza tres cuartos de taza de leche y un cuarto de taza de yogur griego.
Pastel de yogur fácil
Alyssa es la editora de alimentación de Closer Weekly. También edita revistas de salud y nutrición de interés especial para Centennial Media sobre temas como el ayuno intermitente, la salud intestinal y la dieta ceto. Antes de trabajar como redactora independiente sobre alimentación y bienestar, Alyssa fue redactora en la revista First for Women, donde colaboró en las secciones de nutrición, alimentación y fitness.
La sección de yogures del supermercado parece crecer día a día, y con razón: Este tentempié dulce y cremoso está repleto de proteínas energizantes y probióticos nutritivos que lo convierten en el desayuno, el almuerzo o la merienda perfectos. Pero hay muchos más usos deliciosos para el yogur que sacarlo del envase y llevárselo a la boca. Sigue leyendo para descubrir cinco formas geniales de cocinar con yogur.
El yogur queda muy bien en panes, bizcochos, magdalenas y pasteles, ya que aporta un ligero sabor ácido y una textura ligera y esponjosa. Puedes sustituir el yogur por varios productos lácteos, como la nata agria y el kéfir, en muchas recetas, o preparar una receta que utilice yogur específicamente. Si en una receta se pide yogur normal y tienes griego, dilúyelo con un poco de agua. O si la receta pide yogur griego y tienes yogur normal, simplemente cuela parte del líquido.
Bizcocho de limón
El yogur griego puede venir al rescate para sustituir ciertos ingredientes cuando estás en un apuro, y es una gran manera de mejorar los platos favoritos. Ya sea para hornear magdalenas o hacer lasaña, el yogur griego es lo suficientemente versátil para platos dulces y salados. Sustituye el yogur griego cuando te quedes sin un ingrediente clave, o para añadir un sabor más intenso.
El yogur griego se elabora colando el yogur normal para eliminar el suero líquido, lo que da como resultado un yogur más espeso, cremoso y amargo. En comparación con el yogur normal, el griego tiene el doble de proteínas (una ración suele contener 15 gramos) y un 14% menos de lactosa, pero sigue aportando 13 nutrientes esenciales, como el calcio.
Incorporar yogur griego a tus comidas añade proteínas para mantenerte saciado durante más tiempo, a la vez que aporta los nueve nutrientes esenciales de los lácteos. Descubre cómo puedes empezar a utilizar el yogur griego en tus recetas favoritas. Aquí tienes una guía de conversión:
Leche: Si te falta leche, leche en polvo o nata líquida, puedes utilizar yogur griego para compensar la diferencia. Si tu receta requiere una taza de leche, utiliza tres cuartos de taza de leche y un cuarto de taza de yogur griego. Echa un vistazo a este batido de granada o a la tarta de queso Cottage para ver cómo se hace.
Receta de tarta de limón de Starbucks
¿Te has dado cuenta de cuántas recetas de repostería llevan yogur griego? Si estás pensando "todo me suena a griego", es hora de que descubras cómo el yogur griego añade un arma secreta de exquisitez y deleite a tu repertorio de repostería saludable.
El yogur griego es un tipo de yogur al que se le ha quitado el suero, lo que da como resultado una consistencia mucho más espesa que la del yogur normal. Este tipo de yogur es el preferido desde hace mucho tiempo en algunas partes de Europa y Oriente Medio, por lo que llamarlo yogur "griego" o "estilo griego" es simplemente un guiño a este hecho. Al igual que el yogur sin colar, se presenta en diferentes sabores o puede comprarse solo.
Por un lado, el proceso de colado reduce la cantidad de lactosa en el yogur griego, lo que significa que es naturalmente más bajo en azúcar que el yogur sin colar. Y aunque el yogur griego es más denso que el yogur sin colar, tiene más proteínas y menos carbohidratos.
Por otra parte, es un sustituto muy saludable en repostería. Aunque el yogur griego a menudo contiene más calorías que el yogur natural, normalmente tiene muchas menos calorías y menos grasa que los ingredientes comunes para hornear, como la crema agria, pero puede ofrecer resultados similares sin sacrificar el sabor.